Monterrey Refuerza Medidas de Seguridad Ante la Marcha del Día Internacional de la Mujer

Soy de Monterrey

Para la marcha del 8 de marzo, las autoridades de Monterrey han implementado una serie de medidas de seguridad para proteger los edificios y monumentos históricos en el centro de la ciudad. Las acciones buscan garantizar la seguridad de los participantes y evitar daños a la infraestructura urbana.

Protección del Patrimonio Histórico

Una de las principales medidas adoptadas fue remover los barandales de los monumentos ubicados en la Explanada de los Héroes, para evitar que los manifestantes los utilizaran como proyectiles contra el Palacio de Gobierno, como ocurrió en marchas pasadas. Estas acciones forman parte de un esfuerzo por proteger el patrimonio histórico de la ciudad, que podría verse afectado durante las manifestaciones.

Refuerzan Seguridad en el Edificio Acero

En la intersección de Ocampo y Zaragoza, el emblemático Edificio Acero ha reforzado sus medidas de seguridad. Los cristales en la planta baja del edificio han sido cubiertos con paneles de madera, como parte de un blindaje preventivo para evitar daños durante las protestas. Estas medidas responden a los incidentes ocurridos en marchas anteriores, donde algunos manifestantes causaron destrozos en diversos puntos del centro de Monterrey.

Llamado a una Manifestación Pacífica

A pesar de las medidas de blindaje implementadas, las autoridades han hecho un llamado a los participantes a mantener la paz y el respeto durante la marcha. Se ha solicitado que la manifestación se desarrolle en un ambiente de seguridad, sin recurrir a actos de violencia o vandalismo. El objetivo es garantizar que el 8M sea un espacio de expresión legítima, en el que se reivindiquen los derechos de las mujeres, sin comprometer la seguridad pública ni dañar el patrimonio urbano.

Un Día de Reivindicación y Respeto

Se espera que la marcha del 8 de marzo en Monterrey se lleve a cabo de manera pacífica, permitiendo a las mujeres alzar la voz por la igualdad de derechos, el cese de la violencia de género y la justicia social. Las autoridades municipales y estatales seguirán de cerca los eventos, con el fin de asegurar que todos los participantes puedan ejercer su derecho a manifestarse en un entorno de seguridad y respeto mutuo.